- La cubana TABLADA entiende el hacer artístico como un magnetismo que ha de atraparla según avanza en el proceso que ha abierto sobre la reflexión de su condición creadora. Fluctúa entre la materia, el color y la línea, entre la abstracción y una figuración que solamente se atisba.
Ella materializa su pintura desde una forma inconcretada porque quiere captar la hondura de un pensamiento volátil, que se expresa según la placidez en que lo recibe, porque las capas que emergen de la superficie son su propio reflejo. Su voluntad es que esa forma que tantas referencias tiene en todas las direcciones sea su contenido.
La misma ambigüedad con que se percibe constituye la plástica de su enigma, de una labor que revela una lírica que resumen y compendia su preocupaciones existenciales, quedando plasmada en unas obras construidas con una inseguridad que lucha consigo misma.
Al lado de pequeñas cruces negras
-Anclas echadas en finales puertos-
Yacen los nombres de los muertos
Del día, horizontales
Como muertos reales.
Enorme ahora, sobre el papel frío,
Junto a las cruces bailotea el mío.
(Alfonsina Storni)
Vivencias Plásticas 